La realización de programas e innovaciones que impliquen Buenas Prácticas realizadas por UNDEC tiene como objeto principal promover e impulsar, con un diseño simple y eficaz, y, en torno a los pilares de la Doctrina Social de la Iglesia, acciones en donde nuestras empresas socias practiquen políticas socialmente responsables, así como una economía centralizada en la persona, en el desarrollo humano y en el Bien Común.
A fin de servir como modelo e inspiración para otras empresas se señalan a continuación enfoques estratégicos para la implementación de nuestra idea libertaria e inclusiva en la gestión directiva de las organizaciones:
A fin de servir como modelo e inspiración para otras empresas se señalan a continuación enfoques estratégicos para la implementación de nuestra idea libertaria e inclusiva en la gestión directiva de las organizaciones:
Desarrollo personal empresarial
Enfoque en la expansión de libertades (Teoría de las Capacidades Amartya Sen)
Enfoque humanitario en culturas organizacionales (Cultura Sólida)
Enfoque en el bien común
Economía basada en la persona (Respeto a los Stakeholders)
Sostenibilidad Corporativa
Respeto a la dignidad de las personas (Stakeholders – accionistas, entorno interno y externo)
Respeto a la propiedad privada
Autoridad responsable, ética y honrada
Subsidiaridad y autonomía empresarial (Apoyo empresarial)
Políticas inclusivas en la gestión del trabajo humano
COMPROMISO UNDEC
Gestionar el Cambio
UNDEC proponer asumir los roles principales en la transformación del medio empresarial, impulsando la participación de un número cada vez mayor de empresas comprometidas con asumir políticas corporativas socialmente responsables. Asimismo, la asociación busca desarrollar mecanismos de concertación para la solución de problemas sectoriales y nacionales, contribuyendo así significativamente con el progreso del país.
Al mismo tiempo, UNDEC busca ser una entidad activa y promotora de la construcción de una sociedad más justa, más inclusiva, más fraterna y, sobre todo, más humana. Esto quiere decir que, desde el Ápice Estratégico de las organizaciones, los dirigentes mayoritarios realicen sus funciones correspondientes, y, al mismo tiempo, impulsen la instauración de un mejor orden social y promuevan el desarrollo de una economía que este al servicio del hombre. Acciones que se materializarán en la creación de valor de las organizaciones peruanas y, por ende, en el desarrollo de económico, político y cultural del país.